Todo comieza cuando una de estas tarde de frío y aburrimiento en la que no tienes ganas de estudiar, te acuerdas de tu abuelita, que seguro estará viendo la televisón sola en su casa.
Pués como venía diciendo fui ha hacerle una pequeña visita y pasando el tiempo mi abuela estaba arta de ver siempre el mismo canal y me mandó a buscar el mando a distancia en uno de los cajones del salón. He aquí, en este mismo momento cuando me encuentro un botón muy antiguo y deteriorado. Entonces mi abuela me contó la triste historia que a su padre desgraciadamente le tocó vivir.
Todo comienza en el año 1907 cuando mi bisabuelo nace, en una familia pobre, destinada a la dura vida de aquellos años. Mi bisabuelo al parecer era arriero y entonces mi abuela me explicó dicha profesión. Consistía en ir de pueblo en pueblo con cargas tiradas o acarreadas por burros, especialmente mi bisabuelo se dedicaba a vender el carbón, patatas, boniatos y especialmente y en mayor cantidad la cal. Este fue su obligado trabajo y era analfabeto debido a que a su padre le interesó que como era el único varón junto a él le ayudara en su trabajo . En su familia, según me contó mi abuela eran ocho hermanas y un varón. Y por último, lo que mi abuela me contó fue que cuando murió su padre el era el que debía tirar de su pobre familia.
Un día que comenzaba como otro cualquiera mi bisabuelo se vió obligado a tener que robar un cochino para su familia y durante este proceso el cual estaba totalmente prohibido lo pillaron los alguaciles.Estos, definitivamente sin escuchar escusas ni reclamaciones de mi pobre bisabuelo, le darían una tremenda paliza la cual él no soportó y muere en el acto. Una historia un tanto triste pero que nos demuestra como era la vida de solamente un siglo atrás, y todo esto gracias al botón de mi bisabuelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario